Esta boda fue toda una sorpresa, fue la ultima boda antes de mudarnos desde Latinoamérica a Europa.
Franci chilena de tomo y lomo, con sus tradiciones a flor de piel y por al otro lado tenemos a Michael suizo lleno de energía y con ganas de pasarla bien.
San Pedro de Atacama fue el escenario perfecto para esta boda llena de alegría y amor. Comenzamos en la famosa iglesia del pueblo, en una emotiva boda, donde los adobes antiguos fueron testigos de esta hermoso compromiso. Después pasar a la fiesta en el desierto mas árido del mundo! Bailaron a la luz de la luna en pleno Desierto de Atacama.
Fue una boda mística y mágica llena de simbolismo, comida típica del norte de Chile, presentaciones de fuego y bailes y fiesta toda la noche!
Te dejo con el amor transcultural de Franci y Michael.